La foto muestra la calle Galiano, alrededor de 1904. Al fondo vemos el campanario de la Iglesia de Nuestra Señora de Monserrate, en la esquina de Galiano y Concordia.

Esa iglesia se había construido en 1843 y era heredera de la Ermita de Monserrate que había existido en la zona de la actual Plaza de Albear pero que había sido derribada en 1838 cuando el Capitán General Miguel Tacón decidió abrir una segunda puerta de Monserrate en la muralla, para facilitar el tráfico.

La calle que cruza ante nosotros es San Rafael. El establecimiento llamado La Isla era un popular café, propiedad de un gallego llamado Don Pancho, y allí se construiría en los años 50 la tienda Flogar.

El sitio llamado La Casa Grande era una popular tienda de ropa; en esa esquina se construiría luego el “Tencent” de la Woolworth.

Junto al coche que se ve más a la derecha hay unos toldos donde dice El Encanto. Esa tienda ya llevaba allí un par de décadas y su edificio sería reconstruido varias veces.

Tras la reconstrucción de 1949 tenía 6 plantas y decenas de departamentos, hasta que fue destruida en un incendio provocado, en 1961.

Por cierto, si continuáramos caminando por Galiano unas cuadras más, llegaríamos a la casa de Máximo Gómez, en Galiano 45. El viejo General en Jefe del Ejército Libertador moriría al año siguiente.


Calle Galiano

Calle Galiano (La Habana)

La calle recibe ese nombre en honor a Don Martín Galiano, ministro interventor de obras y fortificaciones, que fue quien, ordenó construir sobre la primitiva vía un puente, al que dio su nombre, y que permitía salvar la Zanja Real.

En 1917, el Ayuntamiento de La Habana decidió cambiar el nombre de Galiano por el de Avenida de Italia, pues, en ese entonces, Cuba se encontraba inmersa en la Primera Guerra Mundial y las autoridades como parte del «clima patriótico» renombraron alguna de las principales calles de La Habana en honor de las potencias aliadas.