El Colegio de Arquitectos fue una prestigiosa asociación profesional alrededor de la cual se nuclearon los arquitectos de Cuba hasta 1960. Surgida como Colegio de Arquitectos de La Habana, en 1933 fue reestructurada y se transformó en el Colegio Nacional de Arquitectos de Cuba el cual asumió por ley, las funciones reguladoras y organizacionales de la arquitectura en la Isla.
Se fundó el Colegio de Arquitectos en La Habana el 13 de marzo de 1916 en un local de la calle Tacón No. 2 y su primer Presidente fue el arquitecto Eugenio Rayneri.
Esa primitiva ubicación sería abandonada en 1926 cuando el Colegio de Arquitectos estrenó una nueva sede social en Infanta y Humboldt que fue proyectada por César Guerra y construida con la estrecha colaboración de sus colegas Armando Gil Castellanos y Francisco Valliciergo.
En 1933, por Decreto Ley del Presidente Ramón Grau San Martín surge el Colegio Nacional de Arquitectos – que asume todas las prerrogativas que hasta entonces había disfrutado el Colegio de Arquitectos de La Habana – y se crean los colegios provinciales, que agruparían a todos los arquitectos cubanos tras la promulgación ese mismo año de la Ley de Colegiación Obligatoria para todos los profesionales (antes de la creación de los Colegios Provinciales, los arquitectos que residían fuera de la La Habana, un 10 % apenas, se agrupaban en la Federación de Arquitectos de Cuba.
Una vez promulgada la Ley, el Colegio Nacional de Arquitectos de Cuba quedó estructurado en seis sedes provinciales una por cada provincia del país y se estableció que cada obra edificada en la República debía ser avalada por el Colegio.
Asociación de carácter profesional el Colegio de Arquitectos, como el Colegio Médico, el de Ingenieros y otros semejantes, nació de la necesidad y con el objetivo de defender los intereses de sus asociados y regular su actividad:
«(…) los tiempos han ido cambiando y las cosas se han complicado cada vez más, haciéndose, día a día, más dura la lucha por la existencia y, desde que los trabajadores manuales comenzaron a sindicalizarse – único medio de obtener mejoras posibles debido a la fuerza que da la unión – las otras clases sociales, entre ellas la de los profesionales, se
Discurso del Presidente del Colegio de Arquitectos, Agustín Sorhegui, en 1947 durante la asunción del cargo
dieron cuenta que era necesario agruparse por profesiones para defenderse colectivamente si no querían perecer, entre otras causas, por el intrusismo y por la competencia desleal entre los mismos profesionales.»
El nuevo Colegio de Arquitectos de Cuba
En 1944, durante la presidencia del arquitecto Manuel Febles se colocó la primera piedra del nuevo edificio del Colegio de Arquitectos, que tardó poco menos de tres años en construirse, durante los mandatos – además del de Febles – de Emilio Vasconcelos y René Echarte.
La «preinauguración» de la nueva sede del Colegio de Arquitectos, proyectada por «Zárraga & Esquiroz» se efectuó en la tarde del 30 de diciembre de 1947. Ese día se revelaron los nombres que llevarían cada una de los salones del edificio en honor a notables arquitectos cubanos:
Así, al Salón de la Secretaría se le nombró «Héctor Díaz Montes»; al Salón de Juntas, «Armando Gil Castellanos» (en honor al colega homónimo, fallecido mientras ejercía el cargo de Presidente del Colegio de Arquitectos (a la entrada de ese salón se colocaría un busto de bronce con su imagen, obra del escultor Tony López); a la biblioteca se le bautizó como «José Mato Requiejo»; a la Sala de Esgrima «José Du – Defaix»; y a la cancha deportiva, «Miguel Chacón» (en recuerdo a un entusiasta miembro del gremio que falleciera en plena juventud y que era fanático del juego).
El día 3 de enero se inauguraría oficialmente el edificio del Colegio de Arquitectos con un concurrido acto, al que asistiera el Alcalde de La Habana, y en el que tomaron posesión de sus cargos los nuevos Ejecutivos del Colegio Nacional de Arquitectos y del Colegio Provincial de La Habana.
Presidió el acto el Presidente saliente Marcial Lacorte y el discurso inaugural estuvo a cargo de Juan Remos (quien, curiosamente también había hecho uso de la palabra cuando se colocara la primera piedra de la antigua sede en 1926). Toda la velada sería amenizada por la Banda de la Marina, dirigida por el maestro Armando Romeu.
Un hito importantísimo para el Colegio de Arquitectos fue la promulgación el 3 de noviembre de 1949 a iniciativa del Ministro de Obras Públicas Manuel Febles de la Ley del Seguro Social del Arquitecto, que no sólo garantizaba una pensión digna a los arquitectos una vez terminada su vida profesional sino que permitía la capitalización de los activos, con los cuales se construyeron cuatro edificios de renta y el panteón de la asociación en la Necrópolis de Colón.
Tras el triunfo de la Revolución Cubana de 1959 la mayoría de los arquitectos cubanos abandonó el país, inconformes con la radicalización del nuevo gobierno de la Isla. El Colegio de Arquitectos quedó acéfalo, dejó de funcionar y sus prerrogativas fueron asumidas por el Centro Técnico de la Construcción. De paso, se dejó de celebrar el Día del Arquitecto que no sería rescatado hasta el año 1983; misma fecha en que volverían a entregarse los Premios Nacionales de Arquitectura, como continuación de las famosas Medallas de Oro que tanto habían prestigiado la arquitectura cubana.
Presidentes del Colegio de Arquitectos
Presidentes del Colegio de Arquitectos de La Habana (1916 -1934)
- Eugenio Rayneri
Presidentes del Colegio Nacional de Arquitectos de Cuba (1934 -1960)
- Gustavo Moreno Lastres (Veáse aquí la composición del Colegio Nacional y de cada uno de los Colegios Provinciales)
- Emilio Vasconcelos
- Manuel Febles
- René Echarte Mazorra
- Pedro Guerra Seguí
- Agustín Sorhegui Vázquez
- Vicente Salles Burell
- Horacio Navarrete Serrano
- Rodulfo Ibarra Pérez
Medallas de Oro del Colegio de Arquitectos de Cuba
1941 – Cine Fausto del arquitecto Saturnino Parajón
1942 – Hospital Maternidad Obrera del arquitecto Emilio de Soto y Sagarra
1944 – Conservatorio Municipal de Música de La Habana del arquitecto Emilio Vasconcelos
1947 – Edificio de apartamentos de 20 y 41 del arquitecto Alberto Prieto
1949 – Residencia de José Noval Cueto del arquitecto Mario Romañach
1949 – Centro Médico Quirúrgico del Vedado del arquitecto Max Borges
1953 – Cabaret Tropicana del arquitecto Max Borges
1953 – Residencia de Evangelina Aristigueta de Vidaña del arquitecto Mario Romañach
1956 – Edificio del Retiro Odontológico del arquitecto Antonio Quintana Simonetti
1959 – Edificio del Seguro Médico del arquitecto Antonio Quintana Simonetti
Trackbacks/Pingbacks