El Día del Abogado se celebra internacionalmente el 3 de febrero. En esa jornada se le rinde homenaje a los hombres y mujeres que practican esa profesión. Sin embargo, muchos países, de manera particular han ido designando sus propias fechas para homenajear a sus juristas.

Así, el Día del Abogado se celebra en Ecuador el 20 de febrero en homenaje al jurista Felipe Borja Pérez; en Chile, el 21 de mayo en recordación del fallecimiento del capitán Arturo Prat, héroe de la guerra con el Perú; y esta última nación el 2 de abril, nacimiento de abogado y presidente Francisco García Calderón… Por sólo citar tres ejemplos, porque la lista sigue, y sigue.

El Día del Abogado en Cuba

Cuba no resulta en este caso una excepción y también estableció su propio Día del Abogado el 8 de junio, en recordación de igual fecha, pero del año 1865, en la que el ilustre patriota y Mayor General del Ejército Libertador cubano, Ignacio Agramonte y Loynaz defendió su tesis doctoral para graduarse de Derecho en la Universidad de La Habana.

Ignacio Agramonte en cuyo honor se designó el 8 de junio como Día del Abogado en Cuba
Ignacio Agramonte y Loynaz defendió su tesis doctoral el 8 de junio de 1865. En su honor se designó esa fecha como Día del Abogado en Cuba

El 8 de junio se estableció como Día del Abogado en Cuba a instancias del Colegio de Abogados de La Habana en 1947 durante el gobierno del Dr. Ramón Grau San Martín y, a partir de entonces, se celebró de forma anual en esa asociación profesional.

Tras el triunfo de la Revolución Cubana de 1959 se cambió su denominación por «Día del Jurista» y luego por el de «Día del Trabajador Jurídico» con el objetivo de darle mayor alcance popular e incluir a todos aquellos trabajadores del gremio que, de una forma u otra, participaban en el proceso de impartición de justicia.