La calle Fábrica en la capital cubana se extiende desde los «elevados» de la Terminal de Ferrocarriles, junto a la Avenida del Puerto en La Habana Vieja hasta la Calzada de Luyanó en el vecino municipio de 10 de Octubre.
A lo largo de su extenso e irregular recorrido de una veintena de manzanas, la calle Fábrica se cruza con calles tan importantes como la Avenida del Puerto, la Vía Blanca, la calle Concha y la Calzada de Luyanó; constituyendo la forma más rápida de enlazar el barrio de Luyanó con la parte más antigua de la ciudad y la zona del puerto.
Desde el punto de vista de su función, la calle Fábrica se puede dividir en dos tramos perfectamente definidos por el parteaguas que constituye la Vía Blanca: un primer tramo industrial y comercial, ligado a la zona de la bahía que se extiende desde la Vía Blanca hasta la Avenida del Puerto; y un segundo tramo, residencial y comercial, que va desde la misma Vía Blanca hasta la Calzada de Luyanó.
Memoria de la calle Fábrica
Aunque a su vera se asentaron varias fábricas y grandes almacenes a lo largo del tiempo, todo parece indicar que el nombre de la calle Fábrica se encuentra relacionado con el pensamiento reformista de la primera mitad del siglo XIX, pues numerosas calles del barrio de Luyanó se distinguen toponímicamente por denominaciones que representan el afán de progreso: «Justicia», «Municipio», «Compromiso», «Fomento», etc…
Fábrica, que atraviesa Luyanó de norte a sur estuvo entre las primeras calles de ese barrio que fue pavimentada con adoquines, de ahí que pronto se convirtiera en una de las de mayor circulación y actividad comercial.
En la manzana que forma la calle Fábrica con las calles Justicia, Santa Felicia y Herrera se encuentra el Parque de Fábrica, uno de los pocos espacios de recreación pública que existen en el barrio de Luyanó y uno de sus dos únicos espacios verdes (el otro parque también colinda con Fábrica y corre a lo largo de la calle Concha hasta el Paso Superior).
Allí, en el Parque de Fábrica, se encuentra el monumento que rinde homenaje al bravo capitán del Ejército Libertador cubano Arturo del Pino, quien cayera en épico combate contra decenas de policías y soldados machadistas el 9 de agosto de 1931.
Pocos edificios notables se asoman a las aceras de la calle Fábrica. Entre los que resultan dignos de mención destacan el Centro de Negocios del Puerto (conocido popularmente como Planta Habana y que en el pasado fuera una fábrica de embutidos) y la sucursal del The Trust Company of Cuba en la esquina de la calle Concha (hoy sucursal del Banco Metropolitano), construido en la década de 1950 por el arquitecto Eugenio Batista González de Mendoza.
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