Se conoce que cuando los hermanos Frías Jacott presentan en 1860 al Ayuntamiento de La Habana su proyecto para la parcelación de 21 manzanas de su Finca “Vedado” le confieren a las mismas 100 x 100 metros de lado, conocida como “manzana o cuadricula regular”, con algunas lógicas variaciones provocadas por el contorno de la costa.

Manzana donde se encontraba la fábrica de ladrillos de Frías Jacott
Foto satelital del Vedado en la que se encuentran delimitadas las manzanas a las que no se les aplicó la normativa del 100 x 100 para proteger los intereses de los hermanos Frías Jacott, promotores de la urbanización del reparto en el siglo XIX.

Las manzanas irregulares de los Frías Jacott

Sin embargo muchos no reparamos tal vez, en que desde entonces, cuando se acomete la urbanización del reparto Vedado, todas las cuadras entre las calles C y D miden 80 metros y entre D y E miden 120 metros.

Ello obedeció al hecho de no afectar la construcción que ya existía, al menos hacia 1859, en los predios de la actual manzana limitada por 3ra a 5ta y de D hacia E (resaltada en el cuadrado rojo), donde radicaba la fábrica de ladrillos “Piedra Artificial Robersona S.A.”, de la propiedad familiar y fundada por José Frías Jacott (hermano del Conde de Pozos Dulces) quien la dirigía (entre otras propiedades) desde sus oficinas en la calle Cuba, No. 21, luego No. 37 antiguo, entre O’Reilly y Obispo (corresponde al actual No. 255), y que jugaría un papel muy importante también en el suministro de estos elementos para la construcción de las primeras residencias del Vedado.