David Calzado y una Charanga Habanera para todos los tiempos (+ 2 temas de leyenda)

Polémico, idolatrado por unos y vilipendiado por otros, David Calzado, el director de la Charanga Habanera, sí es, y eso es cien por ciento seguro, uno de los músicos y compositores más influyentes de las últimas décadas en Cuba. Su visión abarcadora de la música como espectáculo le ha permitido a su agrupación una evolución y renovación constantes que la ha convertido en una verdadera fábrica de estrellas.

Sergio David Calzado Almenares nació en La Habana el 29 de diciembre de 1957. Estudió violín con el maestro Evelio Torres Ferrer en la Escuela Nacional de Arte (ENA) y al graduarse se integró a la Orquesta de Pancho el Bravo, de la que pasaría a Estrellas Cubanas, Iresón, Ritmo Oriental y Violines de Tropicana.

En 1988 lanzó su propio proyecto, la «Charanga Habanera», con la que se dio a conocer la público cubano e internacional y que en sus primeros años se enfocaba en la música tradicional cubana .

David Calzado de la salsa a la timba

La irrupción de la salsa y la fiebre que provocó entre los bailadores de inicio de los 90, impulsó a David Calzado a seguir los pasos de otros músicos cubanos como Issac Delgado y El Tosco que estaban arrasando con ese género. Modificó entonces sustancialmente el sentido de su «Charanga Habanera» y se lanzó de lleno a ese mercado emergente.

Era el año 1993 y el éxito fue apoteósico. De la noche a la mañana, la Charanga Habanera de David Calzado pasó a ser uno de las agrupaciones más populares y famosas de Cuba; gracias, además de a su música, a los elementos visuales que introdujo el director en escena. Cada presentación de la Charanga era un espectáculo en el que los músicos (jóvenes y atractivos) no sólo cantaban, sino que bailaban por «toda la tarima».

«Esta es una orquesta que hace lo que otras no hacen, musicalmente hablando. No es porque sea mejor, sino porque es diferente. Hay quienes imitan lo que hacemos. Trabajamos duro para que esa mecánica se mantenga engrasada».

Entrevista de David Calzado (2013)

David Calzado supo también aprovechar en su favor las expresiones del habla popular, consideradas por muchos chabacanas y vulgares, e integrarlas a sus canciones (algo que ya había hecho NG La Banda, pero que la Charanga Habanera elevó a una nueva dimensión). Su primer disco «!Hey you, loca!» que la radio cubana, que también comenzaba a romper esquemas, difundió hasta el cansancio se convirtió en uno de los más escuchados, sino el más, del año 1993, y demostró a muchos reticentes que en la música cubana se estaba produciendo una revolución generacional.

Que el mismo David Calzado eliminara los violines de su Charanga Habanera y potenciara los instrumentos de viento y los metales en la búsqueda de una sonoridad más agresiva, hablan de la renuncia casi total a los caminos trillados.

El triunfo de la «timba» como fenómeno socio cultural en Cuba debe muchísimo a David Calzado y su Charanga Habanera; tanto como el mismo se debe a la timba, porque si bien es cierto que el músico ha incursionado en otros géneros con éxito, la pegada de estos ha estado siempre condicionada por la fama precedente.

Innovador constante en aras de «seguir pegao», David Calzado no se ha resistido nunca a las transformaciones en la Charanga Habanera, a la que han entrado y salido constantemente músicos y cantantes (algunos para fundar sus propios proyectos) en aras de mantener la visualidad de la orquesta y su preferencia entre los jóvenes. Eso lo ha llevado a preferir, en ciertas ocasiones, caras lindas a grandes voces:

«No estamos en la época de los grandes cantantes, estamos en la época de los cantantes que comunican, que tienen simpatía, que el público quiere ver (…)»

Entrevista a David Calzado (2013)

Por la Charanga Habanera, que en ese sentido pudiera ser considerada como una fábrica de estrellas, han pasado cantantes como Ebblys Valdivia (El Bony), Leoni Torres, Yulién Oviedo, Michel Maza o Randy Malcom (Gente de Zona); que si bien no pueden ser considerados grandes voces, sí son grandes artistas que conocen cómo interactuar, hacerse idolatrar por el público y proyectarse a nivel comercial, un difícil arte que en buena medida aprendieron durante su paso por la agrupación de David Calzado.

Mención aparte merece Leo Vera, quien cantó con la Charanga en los año 90 y a quien la crítica (y el propio David Calzado quien afirma que esta no es época de «grandes cantantes») reconocen como una de las grandes voces de Cuba.

Ebblys Valdivia canta «El Boni» con la Charanga Habanera de David Calzada