Aerovías Q SA constituyó una de las cuatro aerolíneas comerciales existentes en Cuba antes de 1959 y contaba con oficinas en Paseo del Prado No. 12 (en la actualidad en el piso de terrazo del portal del edificio perdura el logotipo de la compañía, con una “Q” con una especie de ala en su parte superior, donde actualmente existe la cafetería Prado 12).

Fue fundada el 28 de septiembre de 1945 por Manuel Quevedo Jaureguízar, quien la operaba desde el aeropuerto de Columbia empleando al personal, el combustible, las piezas de repuesto y otros abastecimientos de origen militar.


Plegable publicitario de Aerovías Q
Plegable publicitario de la compañía cubana de aviación Aerovías Q

Aerovías Q

Contaba con rutas nacionales e internacionales con México, Haití, y Estados Unidos, donde la principal era Cayo Hueso-La Habana.

El costo del viaje a Cayo Hueso en Aerovías Q era muy económico; las personas llegaban en horas de la mañana al aeropuerto de Columbia en Marianao para tomar un avión que salía cada una hora hacia Cayo Hueso.

La gente iba de compras, de paseo, almorzaba y luego tomaba un avión de regreso y en 40 minutos ya estaba de vuelta en La Habana.


Un avión de carga de Aerovías Q

Desde 1957 el principal propietario de Aerovías Q era el entonces presidente de Cuba, Fulgencio Batista, quien había adquirido el 75 % de las acciones de Manuel Quevedo. Otros accionista eran el coronel Francisco Tabernilla (Silito), jefe de la fuerza aérea (8 %), Julio Iglesias de la Torre (7 %) y el propio Quevedo Jaureguízar (10 %).

Según plantea el investigador Guillermo Jiménez en su obra «Las empresas en Cuba (1958)», a través de Aerovías Q, Silito Tabernilla tenía organizado el contrabando de mercancías de origen norteamericano, las cuales vendía en el comercio de Alfredo Zaydén en Calzada y 14, en el Vedado.


Se mantuvo en operaciones hasta el 15 de febrero de 1960 cuando se nacionalizan y fusionan las aerolíneas cubanas, integrándose las empresas “Cubana de Aviación”, “Aerovías Q”, “Cuba Aeropostal” y “Expreso Aéreo Interamericano” en la “Empresa Consolidada Cubana de Aviación”, declarándose posteriormente este día como Día del Trabajador de la Aviación Civil.