El Kid Chocolate se dejó ir como las luces de un puerto querido entre la neblina del oleaje en lontananza. Así fue como lo describió un cronista español asentado en Nueva York cuando el ex campeón del mundo italo-americano, Fidel La Barba, le aplicó la ley de la revancha y le derrotó por primerísima vez.
En el antiguo Madison Square Garden (III) casi 18 mil almas vieron al nacido en el barrio Santa Catalina dar su peor demostración hasta la fecha. El Kid Chocolate, en medio de una racha asombrosa que le llevaría al título mundial en 1931, no tuvo su noche aquel 16 de noviembre de 1930.
El orgullo del Cerro se vio desde el primer asalto sobrepasado por un boxeador con menos talento natural, sin caer en chovinismos debemos mencionar que también sería campeón mundial, pero que esa noche se presentó en mejor condición física, y que además recibía desde las gradas el apoyo entusiasta de gran parte de la colonia italiana asentada en la ciudad.
Aunque surgieron ciertas historias turbias que siempre han rodeado al boxeo profesional en este caso no existían excusas, el Kid perdió esa noche él solo. Pese a que años después se diría que la confianza de los apostadores, que pagaban 3 contra 1 la victoria del Kid y a los cuales una derrota del cubano les provocaría una gran pérdida, podía ser la causa del bajo nivel del cubano, pero la realidad es más simple…
Kid Chocolate, que pase el talento
En aquel momento Eligio Sardiñas (verdadero nombre del Kid Chocolate) estaba empezando a descubrir la noche neoyorkina, a sus 20 años llevaba un ascenso imparable afianzado en el talento descomunal y su privilegiado físico. El Kid Chocolate era un «freak«, con su musculatura torneada, que apareció por esa época desnudo en una revista europea de la cual se hizo eco la Revista Social de Massaguer, embellecida por la velocidad exultante de sus brazos extendiéndose en los jabs marca de la casa que le hicieron famoso.
Pero en esta época, 1930, el Kid había cambiado de manager y estaba firmado por el agente de estrellas Luis Felipe «Pincho» Gutiérrez y este le había dado rienda suelta en la preparación física para este combate. El nacido en el Cerro se presentó en la peor forma física de su vida, con apenas 122 libras (3 menos que el mínimo permitido para la división pluma, lejos de las 130 con las que se presentó su rival) y visiblemente desencajado. El resultado fue una vergonzosa presentación para la gran leyenda cubana de los combates de boxeo.
Amante de las noches largas
La responsabilidad de Gutiérrez en esta desorganización del cubano es evidente, el manager manejaba en esa época a varios boxeadores de la élite y «the cuban bon bon» (el bombón cubano) ya había dado muestras de que su indisciplina fuera del octágono era comparable, he incluso mayor, que su brutal talento dentro de las cintas y bajo las luces. Pero en ese momento Pincho Gutiérrez, de quien el propio Kid aseguró que era honrado y honesto con sus pupilos, no dominaba del todo ese carácter indisciplinado del cubano; y confió en que al Kid le alcanzaría con lo mínimo para volver a ganarle a un boxeador al que había mayoreado el año anterior.
Craso error pues la historia de vida del Kid, que empezó peleando por 15 periódicos para vender, se había acelerado a tal punto que prácticamente salía de los combates para las fiestas donde brillaba con sus dotes de bailarín y de estas parrandas volvía al ring, sin apenas descansar. Sobre la dichosa noche de la derrota ante el bravo La Barba nos cuenta Antonio Arroyo Ruiz lo siguiente:
La primera derrota que sufriera en su vida Kid Chocolate, la recibió -y muy sonada- a las manos del italoamericano Fidel La Barba. En el récord del cubano aparecerá este como el segundo revés del Kid. Pero pese a todos los records del mundo a La Barba le cupo la gloria de derrotar en buena lid por primera vez a la, hasta ayer, «maravilla cubana». El hecho de que Chocolate no fuera anoche más que una sombra del Chocolate de otras veces no fue, naturalmente, culpa de La Barba…
Tomado de la Revista Bohemia de 1930
¿Primera o segunda derrota de Kid Chocolate?
Técnicamente la primera derrota del «negrito del Cerro», el hombre que pasó de vender periódicos a llenarlos mientras rodeaba de un áurea atemporal su figura, había sido derrotado un 7 de agosto de ese mismo 1930 por Jack «Kid» Berg, el único junto a Tony Canzoneri en derrotarle dos veces.
De aquella primera derrota por decisión dividida de los jueces corrieron, como se suele decir, ríos de tinta en forma de cientos de crónicas que reclamaban como ganador al Kid Chocolate, en cambio la trascendencia de la humillación sufrida a manos de La Barba radicaba en que al día siguiente de celebrado el combate las cronistas eran unánimes en su veredicto, en concordancia con los jueces.
Una golondrina no hace primavera, y aunque esta derrota del Kid Chocolate limitó su futuro en esta división conseguiría el cubano el ansiado cinturón de Campeón del Mundo. Además de un récord impresionante pues de los grandes boxeadores de la época, entre los que se encuentran los mencionados Canzoneri y Berg únicos en vencer dos veces al cubanito, el porcentaje de derrota del Kid era el mejor de todos.
Su porcentaje, cercano al 6%, era muy superior al de sus duros rivales, ambos alrededor del 14%, todo esto pese a competir durante gran parte de su carrera con una sífilis terrible, que mermaba la fortaleza física mas no la efectividad del nacido en el Cerro. La grandeza de su boxeo ha quedado registrada de manera memorable en los libros de historia y debe ser recordada de esa manera, sin compadecernos de los episodios de bon vivant que le hicieron perder algunos combates.
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