Ubicada en Calzada No. 356 entre G y H (contigua a la que fuera la casa de la Condesa de Loreto y donde Francisco J. Centurión proyectará la residencia que construyera Morales y Compañía en 1925 para Alfonso Gómez Mena y que hoy ocupa el Protocolo del MINREX); fue un proyecto del notable arquitecto Eugenio Rayneri Piedra y construida de 1916 a 1917 para residencia familiar del rico hacendado matancero Septimio Sardiña Sardiña y su esposa Eugenia Segrerá Herrero.
En los años 1920, Septimio fue uno de los fundadores y vicepresidente de la Compañía del Reparto de Miramar SA, que presidía Mario García Menocal, expresidente de la República (y con suegro suyo, pues su hijo Eugenio Sardiña, estaba casado con Georgina, hija de Menocal). Sus cinco hijos ya habían nacido en Matanzas y vinieron muy jóvenes a La Habana. Su hijo Eugenio también fue hacendado y socio propietario del central Santa Marta (en Camagüey, y propiedad principal de los herederos de Mario García Menocal) y del central Estrada Palma, en Yara, Oriente.
Su otro hijo, Enrique, fue luego propietario familiar de la urbanizadora del Reparto Miramar y de varios inmuebles allí. Su esposa, Elena Azcárate era nieta del abogado Nicolás de Azcárate Escobedo, amigo de José Martí, y en cuyo bufete de la calle San Ignacio trabajara el Apóstol desde fines de 1878 hasta el año 1879 en que fue deportado a España.
La calle Calzada
Desde la segunda mitad del siglo XIX comenzó un activo proceso de urbanización alrededor de la calle Línea en el Vedado de La Habana.
Muy cerca de la calle Calzada, en B entre la propia Calzada y la calle Línea, se encuentran dos de las casas más antiguas del Vedado: los chalets que mandó a construir el farmacéutico Antonio González Curquejo para dedicarlos al negocio del alquiler y que todavía se conservan en los actuales No. 151 y 153.
Trackbacks/Pingbacks